DATOS TÉCNICOS
PROPIEDAD- Particular — AÑO- 2017-2018 — ÁREA- – m2 — ESTADO- Realizado — USO- Residencial — INTERVENCIÓN- Proyecto de Reforma (Obra Menor), Proyecto de Interiorismo, Proyecto de Mobiliario — EQUIPO — Contratista- Trazo Gestión Integral de proyectos — Fotógrafo- Javier Bravo
PALETA DE MATERIALES
1- Hormigón visto — 2- Compac — 3- Laminado de madera de roble — 4- Panelado de nogal — 5- Lacado en blanco — 6- Porcelánico gris — 7- Mosaico hexagonal Hisbalit — 8- Laminado negro Fenix — 9- Porcelánico gris oscuro — 10- Porcelánico gris — 11- Grifería negro mate — 12- Plantas de interior
VISITAS DE OBRA
DIAGRAMA
1- Entrada — 2- Salón terraza — 3- Cocina isla — 4- Estudio — 5- Baño con hidromasaje — 6- Habitación principal — 7- Baño principal — 8- Habitación secundaria
Se buscaba que esta vivienda en el barrio de Embajadores de Madrid tuviera espacios más abiertos, amplios y cómodos. Integramos el salón con la cocina para generar un espacio fluido y abierto que desemboca así, en una terraza hacia el exterior.
Dentro de nuestra “wishlist” se encontraban diversos elementos que queríamos que tuvieran un protagonismo especial: una cocina isla, un baño con bañera amplia, un estudio y dos dormitorios principales, uno de ellos en suite. De hecho, el alma de la casa queríamos que fuera la cocina. Escogimos que tuviera un aire sobrio y contundente, en tonos negros que contrastaran con la frescura y la pureza de los otros elementos que la rodean. La estética que perseguíamos era moderna, actual, masculina y con un toque industrial que logramos también, con el uso de tonalidades oscuras, hormigón visto, robles y maderas de fresno “vintage”.
Para que la cocina destacara como el alma de la casa la situamos en el centro, con tres zonas diferenciadas: la pública, abierta al exterior; la semipública, en la que se encuentran los usos de baño para invitados, estudio y cocina; y la privada, de los dormitorios.
La cocina se caracteriza por esconder en sus laterales puertas correderas que aíslan totalmente la zona pública de la privada cuando se necesite. Es decir, si se quiere privacidad se abren las puertas correderas y la zona estancial se aísla por completo de la zona de sueño. Existen, además, dos ejes secundarios que generan vistas cruzadas de extremo a extremo dando sensación de amplitud.
También somos unos apasionados de la música y la tecnología, por eso necesitábamos controlar mediante una “app” la iluminación, temperatura, canciones y color, entre otros aspectos, para poder crear los ambientes que queríamos en cada momento.
Como curiosidad, una vez que hicimos la demolición, nos encontramos unas preciosas vigas descolgadas que decidimos dejar vistas en las zonas húmedas de baños y cocinas para darle al proyecto ese toque “raw” que tanto nos gusta.